Un punto interesante: por qué algunas personas deciden tener un perro, mientras que otras solo son amigas de los gatos.
Los expertos han estudiado este punto y han llegado a la conclusión de que las mascotas pueden decir mucho sobre sus dueños y, a menudo, mucho de lo que la gente suele ocultar. La respuesta está en los tipos de apego.
Aif.ru informa , con referencia al psicólogo Alexander Nekrasov-Grom, sobre cómo una persona elige una mascota.
El experto confía en que cada uno elige el animal en el que ve lo que más necesita.
Estos animales tienen tendencia a servir y complacer. Se cree que las personas que carecen de amor y calidez se adaptarían mejor a un perro que a un gato.
El perro siempre espera al dueño de la casa, se aburre, lo saluda y cumple sus órdenes. Además, la comunicación con un perro se produce en un nivel emocional diferente.
Esta es una criatura completamente diferente que personifica la libertad y la independencia.
Esta mascota puede permitirse acudir a su dueño cuando quiera, puede morder cuando lo crea conveniente y, si lo dejan salir a la calle, volverá cuando haya hecho suficiente ejercicio.
En otras palabras, una persona elige un animal que personifica lo que le falta y lo que podría diversificar su vida.