A menudo, un gato encantado se encuentra con el dueño en la misma puerta de la casa, después de lo cual comienza a frotarse las piernas o a "chocar" con la persona.
Los expertos han descifrado qué significa este gesto cuando un gato frota su hocico contra la cara, brazos o piernas de su dueño. Nada sorprendente.
Con todos los malentendidos que existen en la comunicación entre animales y humanos, los gatos son bastante comprensibles y predecibles. En absoluto, porque todas sus necesidades se reducen a comer y estar en brazos del dueño.
Con una observación minuciosa, cualquiera puede descifrar el lenguaje corporal de un animal. Pero el mencionado “golpe” es un gesto de trato especial.
El caso es que un gato tiene zonas especiales en la frente, las mejillas y otras partes del cuerpo que liberan feromonas.
Tienen su propio olor único y una persona con su sentido del olfato no puede reconocer este olor.
A los gatos sin estas “marcas” les resulta difícil interactuar entre ellos. Se trata de una forma de reconocer “amigos o enemigos” entre los militares, una forma de transmitir información o garantizar el derecho al territorio.
Y cuando un gato “se topa” con el dueño, lo marcan a él, a él, a la ropa y a otros objetos y partes del cuerpo, haciendo del dueño “suyo”.
También es un indicador del estado de ánimo. Cuanto más activamente se frota el gato, más fuerte golpea con la cabeza la cara del dueño y mayor es su alegría por el regreso de su dueño a casa.