Cómo determinar la edad de un gatito en casa.

24.04.2023 19:20

Los gatitos son criaturas adorables que atraen la atención de personas de todas las edades.

Si encontró un gatito callejero o lo compró a un criador, lo más probable es que desee saber su edad.

En este artículo hablaremos de varias formas de ayudarte a determinar la edad de un gatito en casa.

Califica la apariencia del gatito.

El primer paso para determinar la edad es evaluar su apariencia.

La apariencia puede dar una idea de su edad, ya que los gatitos se desarrollan según ciertos estándares. Esto es a lo que debes prestar atención.

Foto: © Belnovosti

Ojos

Los gatitos nacen con los ojos cerrados y los abren recién entre los 7 y 10 días de edad.

Los ojos de un gatito deben estar claros y brillantes entre las 2 y 4 semanas de edad, sin signos de inflamación o secreción.

Orejas

Las orejas comienzan a crecer a las 3-4 semanas de vida. Si las orejas del gatito siguen caídas después de 4 semanas, entonces probablemente tenga menos de 4 semanas.

Dientes

A los gatitos les empiezan a salir los dientes de leche entre las 2 y 4 semanas de edad. Entre las 8 y 12 semanas todos los dientes de leche deberían estar en su lugar.

Si el gatito ya tiene dientes permanentes, entonces ya tiene más de 3 meses.

Peso

Los gatitos recién nacidos pesan entre 85 y 113 gramos. Durante las primeras semanas deberían ganar peso una media de 10 a 15 gramos al día.

A las 8-12 semanas, el gatito debe pesar entre 700 y 900 gramos.

Evaluar el comportamiento

El comportamiento de un gatito también puede indicar su edad. Por ejemplo, los gatitos jóvenes suelen ser más juguetones y activos que los mayores.

Sin embargo, si estaba desnutrido o tenía problemas de salud, su comportamiento puede diferir del de otros gatitos de su edad. Presta atención a cómo juega el gatito, cómo reacciona al medio ambiente y a las personas.

Autor: Elena Gutiérrez editor de recursos de internet

Contenido
  1. Califica la apariencia del gatito.
  2. Ojos
  3. Orejas
  4. Dientes
  5. Peso
  6. Evaluar el comportamiento