Los gatos son criaturas independientes. Pero esto no significa que no les guste la atención, el cariño y el cariño. También es importante recordar ciertas reglas de comportamiento con una mascota.
Hoy hablaremos de las acciones del dueño que pueden arruinar la relación con el animal.
El primer error y el más grave es ignorar a los médicos. Un gato, como una persona, necesita supervisión médica y vacunación. Si descuidas esta sencilla regla, puede costarle la vida a tu mascota.
No debes alimentar a tu gato “de la mesa”. La mascota debe tener su propia dieta equilibrada, y algunos alimentos que una persona está acostumbrada a comer pueden simplemente dañar la salud del gato.
No se puede golpear a un animal ni gritarle. Todo esto arruinará la relación de la mascota con su dueño y no ayudará en modo alguno en su crianza y adiestramiento. El gato experimentará un estrés constante, lo que significa que se sentirá intimidado y desequilibrado.
Otra regla a recordar es que tu mascota necesita un lugar donde pueda estar sola. Por lo tanto, no debes sacar al gato de un lugar apartado si no está pidiendo ayuda, sino que está cómodamente acurrucado en una bola.
También hay que recordar que los gatos no pueden hablar el lenguaje humano, pero sí pueden dar señales de forma activa mediante el lenguaje corporal. Las señales no se pueden ignorar. Así es como las mascotas pueden advertir sobre lesiones o problemas de salud.