Cuando los gatos están de humor juguetón, se acercan a su dueño y se tumban en su regazo, esperando que éste les muestre sus sentimientos más tiernos.
Sucede que no sólo se encuentran en el regazo, sino también en el libro que la persona está leyendo, o incluso en el teclado de una computadora o portátil, lo que ya es una libertad inadmisible.
El texto que una mascota puede escribir con sus patas o con su cuerpo no se puede leer. Lo principal es que no resulta ser una carta u otro mensaje importante en un chat de trabajo.
Averigüemos por qué los animales se sienten tan atraídos por la tecnología y cómo librarlos de esta desgracia.
En primer lugar, a los gatos les encanta todo lo suave, especialmente si está al lado de donde se sienta el dueño. Y los botones del teclado son como un sillón de masaje para un gato si te acuestas sobre ellos.
En segundo lugar, durante el funcionamiento, el equipo genera calor y, donde hay una fuente de calor, hay gatos. Y si aquí está blando y puedes acostarte, entonces el gato definitivamente no te pedirá permiso.
En tercer lugar, los científicos notaron que a los gatos siempre les gusta sentarse dentro de algo limitado: cajas, cajones, etc. Durante el experimento, los gatos incluso se sentaron en el centro de un rectángulo dibujado en la superficie, aunque había mucho espacio libre a su alrededor. Se cree que esto hace que los animales se sientan más seguros.
Y, por supuesto, no debemos olvidar que el gato sólo quiere llamar la atención del dueño.
Tendrás que mostrar perseverancia e imaginación. Si se trata de un libro, puedes poner otro al lado, sobre el que el gato pueda acostarse y recostarse todo el tiempo que quiera. También puedes adaptar un teclado viejo debajo de un banco. La opción más sencilla es llevar a tu mascota en tu regazo o ponerle algo más cómodo a su lado, por ejemplo, una manta de felpa o una almohada.