Mucha gente considera que los gatos son animales emocionalmente fríos, pero esto no es cierto.
Según las investigaciones, los gatos son capaces de sentir nuestro estado de ánimo y responder a él.
Si el dueño está estresado, el gato también lo estará.
Sintiendo que el dueño está triste, el gato comenzará a calmarlo por todos los medios a su alcance.
Nunca ahuyentes a un gato cuando intente mostrarte simpatía, incluso si te molesta.
Tu mascota puede ofenderse mucho y empezar a evitarte.