Algunos dueños de gatos alimentan a sus mascotas con ajo para protegerse de los parásitos.
Y no sospechan que le están causando daño a la mascota.
Te explicamos por qué nunca debes darle ajo a tu gato.
No debes arriesgar la salud de tu mascota recurriendo a medios dudosos como el ajo.
Incluso si le das ajo a tu gato en pequeñas cantidades, puede desarrollar una intoxicación.
Los síntomas pueden ser los siguientes: malestar en las heces, náuseas, vómitos, letargo, disminución de la temperatura corporal.
La intoxicación también puede ocurrir de forma latente, y esto es aún más peligroso.