¿Recogió cebollas y las envió a almacenar?
¿Pero le preocupa que la cosecha se estropee mucho antes de que termine la temporada de heladas?
¡Deja a un lado tus dudas! Al fin y al cabo, seguir unas sencillas reglas garantizará la conservación de la verdura.
Numerosos bulbos definitivamente no comenzarán a pudrirse en invierno. Además, conservarán todo su sabor.
Antes de guardar los bulbos, es necesario enfriarlos. Esto debe hacerse en el jardín.
A continuación, debes secar las verduras.
Contrariamente a la creencia popular, las cebollas no necesitan almacenarse en cajas especiales.
Puedes simplemente tirar los bulbos en una pila.
Pero antes de eso hay que poner paja o verter arena. Cualquiera de estos materiales ayudará a eliminar el exceso de humedad.
Entonces, con la humedad, cuyo nivel no debe ser alto, el problema está resuelto.
Pero también es necesario recordar la importancia de respetar otras condiciones de almacenamiento de la cebolla.
La habitación donde se almacenan las verduras no solo debe estar seca, sino también fresca. Los cambios de temperatura son inaceptables.
Además, se debe proporcionar ventilación. Si no hay una circulación de aire normal en la habitación, las bombillas almacenadas rápidamente quedarán inutilizables.