Un sistema de raíces potente es la clave para obtener plántulas fuertes con tallos gruesos.
Te contamos qué añadir al suelo para que las plántulas empiecen a echar raíces fuertes desde los primeros días.
El secreto de un buen sistema de raíces es la longitud de las raíces. Sin embargo, en un recipiente pequeño las raíces no tienen dónde crecer.
Por lo tanto, hay que recurrir a trucos, es decir, crear obstáculos artificiales para las raíces en el suelo. Al intentar rodearlas, las raíces aumentarán en longitud.
¿Cómo hacer obstáculos? Es muy sencillo: con cultivadores. Puedes utilizar vermiculita, perlita, zeolita.
Las cáscaras de huevo trituradas también son un buen agente aflojante.
En segundo lugar, un buen drenaje es necesario para el desarrollo normal de las raíces.
La opción más fácil es hacer agujeros en el fondo de las cajas o vasos de plántulas.
Si el tamaño del recipiente lo permite, puedes hacer una capa de drenaje, por ejemplo, de espuma plástica.
Regar a través de la bandeja también ayuda a aumentar la longitud de las raíces.
En tercer lugar, los fertilizantes nitrogenados deben utilizarse con precaución.
Las plántulas sobrealimentadas con nitrógeno tienen raíces pequeñas y atrofiadas.