Casi todos los residentes de verano conocen de primera mano los peligros de la mosca de la cebolla.
El insecto puede causar graves daños no solo a las cebollas, sino también al ajo y a las flores bulbosas.
Afortunadamente, derrotar a esta plaga común es bastante fácil.
Y no se necesitan medicamentos costosos. La sal de mesa común puede actuar como un remedio que salva vidas.
Coge un balde y llénalo de agua, dejando poco espacio.
Agregue unos 250 gramos de cloruro de sodio al líquido.
Mezclar bien el contenido del recipiente. Y con esto llega a su fin la preparación del remedio milagroso contra la mosca de la cebolla: no hace falta añadir nada más.
A continuación solo queda regar los lechos de cebolla con la solución preparada.
Es recomendable hacer esto cuando la altura del arco sea de unos seis centímetros.
Después de 2-3 semanas, es necesario realizar casi el mismo procedimiento. Sólo hay una diferencia: la solución debe estar más concentrada. Entonces, por 10 litros de agua corriente no debe haber 250, sino 400 gramos de sal de mesa.
Cuando haya pasado otro medio mes, volver a “tratar” el lugar donde se cultivan las cebollas con agua salada. Pero esta vez es necesario utilizar medio kilo de cloruro de sodio por cubo de agua.