Conseguir una rica cosecha de fresas no es tan difícil como parece.
Hablamos del método finlandés de cultivo de fresas.
La esencia del método finlandés es plantar plántulas sobre material de cobertura.
Las camas deben ubicarse en una zona soleada de sur a norte. Los arbustos se plantan en una, dos o tres hileras.
Formamos camas altas (hasta 40 cm) de 50 a 60 centímetros de ancho y colocamos una manguera perforada o cinta de goteo en el centro.
La longitud de la manguera/cinta debe coincidir con la longitud de la cama. Conectamos un extremo a la manguera de riego y cerramos el otro con un tapón.
Cubrimos las camas con material de cobertura y hacemos agujeros con un diámetro de 7 a 10 centímetros en un patrón de tablero de ajedrez.
La distancia entre los agujeros debe ser de 25 a 30 centímetros, entre filas, de 30 a 35 centímetros.
Plantamos fresas. Cuidado estándar: riego regular, fertilización y recorte del bigote.