Las caléndulas no se deben tirar después de la floración; cualquier jardinero experimentado lo sabe.
Esta no es una planta que pueda vivir su vida en un montón de abono o en un hoyo. Con habilidad, puedes preparar un maravilloso repelente de plagas con caléndulas.
Las maravillas repelen las plagas durante la floración, pero incluso después de marchitarse, no se vuelven menos útiles.
En su composición, las caléndulas se parecen al abono verde y siguen siendo útiles incluso cuando dejan de crecer.
Los arbustos de caléndula deben recolectarse y cortarse de cualquier manera conveniente, junto con la raíz, la inflorescencia y el tallo.
Las verduras preparadas se distribuyen uniformemente sobre las camas, después de lo cual se desentierran o se incrustan en el suelo de otra manera conveniente hasta una profundidad de 20 cm.
Se cree que después de tal tratamiento de las camas no habrá temor a ataques de plagas en zanahorias, repollo, fresas y tomates.
Las caléndulas repelen perfectamente varias pulgas, pulgones y otros insectos.