La alimentación otoñal de las fresas se considera la más importante de una serie de tareas de la dacha. De ello depende el rendimiento de la cosecha y el grado de preparación del productor de bayas para el invierno.
Lo bueno es que en otoño puedes renunciar a lo orgánico. Esto significa que abonar con fertilizantes minerales será más fácil y preciso.
Anastasia Kovrizhnykh, experta de la publicación en línea BelNovosti, agrónoma y paisajista, recordó a los veraneantes lo más importante.
Los fertilizantes minerales, que se pueden aplicar secos o en forma de soluciones, pueden ayudar.
Sin embargo, en cualquier caso, el procedimiento se combina con riego.
1. Sal potásica. El fertilizante se disuelve a razón de 20 gramos por 10 litros de agua.
2. Superfosfato: la solución se prepara en una proporción de 10 gramos de fertilizante por 10 litros de agua.
Tanto el primer como el segundo fertilizante se utilizan para el riego entre hileras.
3. Puedes disolver 2 cucharadas. l. nitrofoska y 20 g de sal de potasio por 10 litros de agua.
En este caso, el consumo es de hasta 1 litro por arbusto.
4. Sin embargo, la opción más sencilla para alimentar fresas en septiembre es aplicar un fertilizante otoñal complejo.
Los fertilizantes minerales son buenos porque permiten calcular con precisión el consumo según las instrucciones.
Una alimentación adecuada permitirá al productor de bayas recuperar fuerzas antes del inicio del clima frío y producir una rica cosecha en la nueva temporada.