Hacer que una orquídea florezca magníficamente no es tan difícil como parece a primera vista.
Te contamos cómo preparar un abono natural para orquídeas que favorezca la floración.
Lo único que necesitas es café molido natural y sin aditivos.
Verter una cucharadita de café en 0,5 litros de agua hirviendo, enfriar, filtrar y diluir con un litro de agua limpia.
Vierta un poco en una botella con atomizador, rocíe la orquídea y limpie las hojas con un algodón empapado en café.
Alimentamos a la orquídea con el café restante. Coloca la maceta con la flor en un recipiente con café durante media hora, sácala y deja escurrir el exceso de líquido.
Las hojas deben rociarse y limpiarse una vez cada 7 a 10 días y alimentarse una vez cada dos o tres semanas.