Algunas personas logran disfrutar fácilmente de los pepinos hasta el clima más frío, mientras que otras se quedan "vacías" desde finales de agosto.
No es cuestión de suerte ni de variedades especiales de verduras.
Los errores comunes conducen a tales diferencias.
Durante la fructificación, cualquier cultivo gasta una gran cantidad de recursos. Una vez que se agotan los suministros, la cosecha puede olvidarse.
Por eso, no olvides alimentar con pepinos durante toda la temporada.
Algunos jardineros están seguros de que los pepinos necesitan una gran cantidad de humedad para dar fruto. Esta es una idea errónea.
Si "llena" las verduras con agua, esta idea no resultará nada bueno.
Los pepinos empezarán a enfermarse y dejarán de producir cosechas.
Incluso durante el proceso de fructificación, no debes olvidarte de las medidas preventivas que pueden proteger a los pepinos de las plagas y enfermedades más comunes.
Si no se hace esto, no podrá esperar fructificación a largo plazo. Por eso, intenta evitar estos errores a la hora de cuidar los pepinos.