Algunas personas todavía se muestran escépticas sobre el yodo en el cultivo de tomates.
Sin embargo, no sea categórico: la experiencia de muchos veraneantes sugiere que el producto claramente merece atención.
Dado que el yodo es un agente antiséptico, su principal tarea será proporcionar un efecto preventivo. Su uso oportuno será un paso importante para proteger los tomates de diversas enfermedades fúngicas.
Si nota que los tomates no se ven lo mejor posible, también puede recordar el uso de yodo. Las "indicaciones" incluyen la apariencia débil de los tallos, la falta de ovarios en la cantidad requerida, las puntas de mala calidad y la maduración lenta de las verduras.
La forma más sencilla es utilizar la receta clásica, que ha sido probada por muchos. Para ello, mezcle una cucharada de leche (una cucharada) y unas gotas de yodo (no más de cinco) en un balde de agua.
La composición se utiliza para pulverizar.