Los frutos de madreselva tienen un sabor muy interesante: dulzura combinada con acidez.
Además, estas bayas se caracterizan por una consistencia especial: suaves por fuera, muy tiernas por dentro.
La madreselva también es una fuente de vitaminas y microelementos importantes para el cuerpo humano.
Por tanto, no es de extrañar que muchos veraneantes quieran obtener una cosecha muy rica de este cultivo.
Y, contrariamente a la creencia popular, lograr ese resultado no es tan difícil.
Basta con alimentar correctamente la planta, destaca la experta de la publicación online BelNovosti, la agrónoma y paisajista Anastasia Kovrizhnykh .
Durante este período, la planta "reaccionará" bien al nitrato de amonio. Por cubo de agua - 20 gramos de producto.
Cuando los arbustos se marchitan, la planta necesita recibir componentes de nitrógeno, potasio y fósforo.
La opción ideal es utilizar un fertilizante complejo como el nitroamofoska. Puedes agregar un poco de sulfato de potasio.
La planta debe ser alimentada después de recoger las bayas.
Durante este período, el cultivo se beneficiará de la “materia orgánica”: una mezcla de harina de huesos y residuos de madera sin quemar.
Anteriormente, a los residentes de verano se les decía qué fresas se pueden y no se pueden plantar al lado.