La falta de hojarasca y la desaceleración general de los procesos de crecimiento es un problema que puede requerir una solución radical.
Algunos jardineros deciden utilizar preparados especiales clasificados como defoliantes.
De hecho, estas sustancias pueden provocar la caída de las hojas sin afectar la viabilidad del árbol.
Prestemos atención a la opinión del experto de la publicación online Belnovosti y de la agrónoma Anastasia Kovrizhnykh.
Cuando se trata con un defoliante, los procesos metabólicos en las hojas de las plantas cambian, lo que provoca la caída de las hojas.
El defoliante provoca un envejecimiento prematuro, lo que permite al jardinero conseguir resultados.
Pero estos medicamentos pertenecen a la segunda clase de peligro y son difíciles de adquirir para un residente de verano. También pueden hacer más daño que bien.
El defoliante puede dañar los cogollos, provocar quemaduras en los bordes y reducir la viabilidad del árbol, cambiando la temporada de crecimiento.