Mucha gente elige la dracaena no sólo por su aspecto exótico, sino también porque la planta es una de las más fáciles de cuidar.
Sin embargo, no es necesario olvidarse por completo de la flor y sus necesidades: de lo contrario, la dracaena empezará a verse mal.
Como regla general, las hojas amarillas y secas indican que se han violado las reglas de cuidado, dice la experta de la publicación de la red BelNovosti Anastasia Kovrizhnykh , agrónoma y paisajista.
Hay un escenario que no requiere su intervención directa. Si las hojas se secan y se vuelven amarillas en la parte inferior, entonces no hay de qué preocuparse.
Este es un proceso completamente natural.
La calefacción se encenderá muy pronto. Este es un período muy difícil para la dracaena, ya que hace demasiado calor y sequedad. No se puede influir en la temperatura del aire, pero se puede regular la humedad con un sencillo aparato.
No olvides que la flor no necesita riego frecuente. Si agregas más agua de la necesaria, puedes destruir la planta.
Basta con regar sólo una vez por semana.