Antes de pasar a la descripción de la fertilización necesaria para la remolacha en julio, permítanos recordarle: en pleno verano, las plantas, en primer lugar, necesitan riego.
Sin suficiente agua, según la experta de la publicación BelNovosti, la científica agrónoma y paisajista Anastasia Kovrizhnykh, los tubérculos resultarán pequeños y además tendrán un sabor amargo.
Ahora que hemos aclarado los puntos clave, puedes pasar directamente a la alimentación con tranquilidad.
Entonces, para nutrir las verduras, es necesario disolver 1 litro de ceniza en 10 litros de agua y mezclar todo bien.
El siguiente componente es un vaso de vinagre al 9%.
Según jardineros experimentados, apagar la soda con vinagre ayuda a las remolachas a afrontar mejor la absorción de fertilizantes.
Además, será necesario añadir media cucharadita de ácido bórico, que primero se debe verter con agua para que se disuelva.
Todo lo que queda es añadir 2 g de ácido succínico al cubo (también es mejor molerlo previamente y disolverlo en un poco de agua).