A pesar de todas sus características positivas, las frambuesas también tienen una desventaja: la capacidad de la planta para crecer activamente.
Tan pronto como te distraes un poco, la cuidada parcela de frambuesas se convierte en matorrales impenetrables, que de vez en cuando intentan escapar del territorio que se les ha asignado.
Para que esto no suceda, el residente de verano debe hacer al menos un pequeño esfuerzo.
Por lo tanto, si se encuentra en la etapa de planificación de la plantación, asigne un lugar para el frambuesa donde existan factores de restricción naturales para él.
Por ejemplo, un obstáculo puede llamarse camino pisoteado, valla y otras cosas similares que pueden reducir significativamente la velocidad de su "extensión".
Como opción, utilice una valla de barrera que debe excavarse en el suelo alrededor del perímetro del frambuesa, sumergida a una profundidad de aproximadamente 20-30 cm.
Las raíces de frambuesa no pueden superar tal obstáculo, por mucho que lo intenten.
En conclusión, le daremos un consejo más importante: no olvide podar las frambuesas de manera oportuna y deshacerse del exceso de crecimiento.