Si quieres que estas hermosas y frágiles flores te deleiten con su apariencia durante el mayor tiempo posible, debes brindarles una dieta estable y equilibrada.
Como señalan los jardineros experimentados, los elementos nitrogenados deben agregarse inmediatamente después de la poda. Puede ser nitrato de calcio o urea.
Puedes utilizar materia orgánica.
Por ejemplo, como señalan los residentes de verano experimentados, la infusión de ortiga será eficaz.
Después de una semana, las rosas deben ser alimentadas con sulfato de magnesio para estimular no solo el crecimiento de las hojas, sino también de los brotes.
Los fertilizantes se deben volver a aplicar en una semana o semana y media. Aquí debes prestar atención a cualquier remedio mineral complejo.
El producto ideal sería uno etiquetado para rosas o uno floral que contenga nitrógeno, fósforo, potasio y otros elementos.
Si recuerda las manipulaciones simples, las flores podrán decorar el área con su apariencia durante mucho tiempo.