Por un lado, la aparición de hormigas en una zona suburbana es una buena noticia.
Los insectos destruyen muchas plagas y mejoran la estructura del suelo.
Por otro lado, las propias hormigas suelen dañar los cultivos de huertas y hortalizas, deteniendo su crecimiento y facilitando la propagación de los pulgones.
Es por eso que muchos jardineros deciden pelear con representantes del orden Hymenoptera.
Puedes proteger tus camas de los insectos utilizando la hoja A4 más común.
Primero, el material debe convertirse en una colección de pequeños trozos de papel utilizando unas tijeras.
Cada uno de los rectángulos preparados debe empaparse en agente antihormigas.
Tan pronto como la masa gelatinosa se absorba en el material, todos los trozos de papel deben pegarse en el hormiguero o en aquellos lugares donde aparecen con mucha frecuencia "invitados" no invitados.
El efecto debería aparecer después de 24 horas. Lo más probable es que las hormigas simplemente abandonen su nido.
Lo más interesante es que el papel empapado en insecticida es muy apto para su reutilización.
Si no pudo deshacerse de las plagas la primera vez (o si hubo varios hormigueros), entonces los rectángulos se pueden usar por segunda vez.