Casi todos los residentes de verano se encontraron con una situación en la que el agua de los barriles comenzó a ponerse verde.
Pero si conoces una forma sencilla, el agua puede seguir siendo más saludable y nutritiva para las plantas.
Para un riego exitoso se necesita agua de alta calidad, mientras que el líquido “verde” o “floreciente” puede incluso ser perjudicial.
La forma más sencilla es cerrar la tapa del barril. En este caso, el agua no estará expuesta a la luz solar, lo que provoca el crecimiento activo de algas.
El segundo método es el uso de permanganato de potasio. Agrega un poco cada vez que llenes el barril con agua. Esta sustancia previene la aparición de algas y previene la formación de placa verde.
Estos sencillos métodos permitirán evitar la floración y hacer que el agua sea más adecuada para el riego.
La calidad del agua afecta directamente el rendimiento y condición de los cultivos, por tal motivo es necesario prevenir los procesos de floración.