Las manzanas son una de las frutas más populares y saludables del mundo. Pero a veces los jardineros que cultivan árboles frutales se enfrentan al problema cuando los frutos se pudren directamente en los árboles.
Los motivos pueden ser varios: desde errores en el cuidado hasta ataques de plagas y malas condiciones climáticas.
Aquí debe recordar los métodos de cuidado simples. Es importante realizar podas periódicas y controlar el estado de las hojas. Periódicamente es necesario realizar un tratamiento contra los parásitos.
Además, es necesario elegir las variedades adecuadas que sean más resistentes a las enfermedades.
Los residentes de verano señalan que se deben seguir las reglas de recolección.
Las manzanas que ya han comenzado a pudrirse no deben almacenarse junto a frutas sanas.
Si hay frutos dañados en el árbol, se deben retirar para evitar la propagación de infecciones.
Los frutos y hojas caídos deben retirarse a tiempo para evitar que se multipliquen microorganismos dañinos.