Un solo tratamiento te permitirá disfrutar de resultados lujosos durante todo el verano.
Las malas hierbas siempre han sido uno de los principales problemas para los jardineros y jardineros.
La hierba crece en los lechos, tratando de asfixiar a las plantas jóvenes y quitarles sus nutrientes y agua.
Las malas hierbas también encuentran un lugar en los caminos entre los parterres, desde donde se trasladan sistemáticamente a las propias plantaciones.
Los veraneantes experimentados resuelven este problema de diferentes formas. Por ejemplo, el aserrín y la piedra triturada son populares. Una capa de material de 7-10 cm te permitirá olvidarte de las malas hierbas durante todo el verano.
La sal controla eficazmente el césped entre las camas. Basta disolverlo en agua y luego regar los caminos.
Incluso los grandes matorrales son impotentes contra la sal de mesa. En un litro de agua caliente es necesario disolver 2 cucharadas. l. sal y riega las malas hierbas. O primero rocíe los caminos y luego vierta líquido caliente.
Pero es necesario trabajar con cuidado para que el agua salada no entre en las camas, de lo contrario no solo las malas hierbas sufrirán.