No sólo es importante el producto utilizado para controlar las plagas.
Los veraneantes tienen una extensa lista de insectos que les causan muchos problemas desde la primavera hasta el otoño.
La mosca blanca no ocupa el último lugar en este ranking. Si no se toman medidas, es fácil que se quede sin cosecha.
Pero en algunos casos el entusiasmo da paso a la decepción. Los jardineros se dan por vencidos cuando queda claro que ningún producto químico o trampa puede eliminar el parásito.
Sin embargo, el problema no está en absoluto en los medios utilizados contra la plaga. El momento en que comienza la lucha contra la mosca blanca juega un papel importante.
Por ejemplo, la mayoría de los residentes de verano prestan mucha atención a plantar solo el sábado o domingo. Pero las plagas no tienen días festivos ni fines de semana.
Por lo tanto, la mosca blanca puede comenzar a actuar fácilmente el miércoles y el sábado ya habrá toda una colonia de plagas. Tres días es mucho tiempo en el caso de la mosca blanca.
Durante este tiempo, se le puede expulsar por completo del sitio o permitir que se reproduzca activamente, después de lo cual incluso los mejores venenos no serán tan efectivos.