Los jardineros a menudo enfrentan un problema: después de la floración, las cerezas se secan y no dan fruto.
Hay varias razones por las que esto sucede. En cualquiera de ellos es necesaria la participación de un jardinero.
1. La falta de humedad puede provocar este resultado. La situación se agrava especialmente cuando hace calor. Reanudar el riego corregirá el problema.
2. Fertilizante incorrecto. Si el suelo no contiene suficientes nutrientes, las flores y los frutos pueden secarse.
3. Plagas y enfermedades. Por ejemplo, una causa común es una quemadura monilial.
En este caso, se eliminan todas las ramas infectadas y el árbol se trata con mezcla de Burdeos.
Es mejor hacer esto antes de que se rompan los cogollos, si se observó un problema similar el año pasado.
Por tanto, las cerezas necesitan riego regular, fertilización y prevención de plagas y enfermedades.