Para cosechar muchas bayas dulces y jugosas cada año, debe asegurarse de que las plagas no arruinen la cosecha.
Las frambuesas tienen muchos enemigos. Entre ellos se encuentra la polilla de las yemas de la frambuesa, que daña las yemas y los brotes de los arbustos.
Las orugas esperan el invierno en capullos bajo la corteza. Lugares favoritos durante el clima frío:
La plaga se activa a principios de la primavera. Las crías de la polilla de la frambuesa salen, muerden los cogollos de la frambuesa y se comen su contenido. Esto provoca que los cogollos se sequen.
Las orugas comen los brotes. Las larvas que viven en los riñones dejan agujeros de gusano en ellos.
Cuando las frambuesas florecen, las orugas se convierten en mariposas y ponen huevos en las flores. Así, la población de plagas aumenta gradualmente, por lo que el frambuesa sufre graves daños.
Las medidas preventivas incluyen:
Para combatir la plaga se utiliza una composición sencilla que no contiene una gota de productos químicos. El producto se basa en ajenjo: 800 g de materia prima seca o medio cubo de plantas recién cortadas.
La hierba se vierte con 10 litros de agua y se infunde durante 24 horas. Luego, el líquido resultante se prende fuego y se lleva a ebullición.
El producto se filtra y se diluye con agua hasta duplicar su volumen. Después de esto solo queda procesar las frambuesas.