Cultivar cebollas es un proceso simple e interesante que no requiere habilidades ni conocimientos especiales, pero también tiene sus desventajas.
El color amarillento de la parte verde de las plantas molesta a los veraneantes que ya estaban dispuestos a coger una pluma y desmenuzarla en sopa o patatas fritas.
Si no se toman medidas, es posible que no se produzca ninguna cosecha de cebollas verdes. Pero es demasiado pronto para darse por vencido. Hay una manera de arreglarlo todo y obtener muchas verduras jugosas y picantes.
Las principales razones de este fenómeno:
Basta un solo motivo para que la pluma empiece a ponerse amarilla.
En este caso, una fuente de nitrógeno ayudará. Por ejemplo, urea (carbamida). El producto se diluye en agua y luego se riega desde la raíz de la cebolla. La fumigación no solucionará el problema.
Este matiz se puede solucionar aún más fácilmente. Es necesario disolver ½ cucharadita en 10 litros de agua. sal y vierte la cebolla debajo de la raíz.
La peronosporosis es un problema más complejo que requiere un enfoque especial. Los veraneantes utilizan cualquier fungicida adecuado, que se neutraliza en el momento de la cosecha.
El mildiú velloso no desaparecerá por sí solo. Debido a la enfermedad, toda la cebolla puede pudrirse.