Estamos acostumbrados al hecho de que la sal en el sitio se usa solo para deshacerse de plantas innecesarias.
El hecho es que en concentraciones elevadas la sustancia hace que el suelo no sea apto para la supervivencia de las plantas.
Sin embargo, con la dosis correcta se puede mejorar significativamente el desarrollo del ajo y la cebolla, afirma la agrónoma y paisajista Anastasia Kovrizhnykh, experta de la publicación online BelNovosti.
El objetivo principal del evento es superar las principales plagas que interesan al cultivo. Como regla general, la mosca de la cebolla no puede soportar tal riego.
El procedimiento también es una prevención eficaz contra enfermedades comunes.
Por tanto, la cebolla y el ajo se sentirán muy cómodos.
Primero debes medir de 200 a 500 gramos de sal. Puedes tomar el producto más común. Dé preferencia a la molienda fina, ya que esta sal se disolverá mucho más rápido.
Echamos este volumen de sal en un balde de agua y empezamos a regar.
Después de aproximadamente media hora, se deben volver a regar los cultivos, pero con agua normal.