El ajo debe tener un aroma muy brillante.
Si el sabor de la verdura cultivada difícilmente puede llamarse picante, es evidente que el jardinero ha cometido algún error.
También es deseable que los ajos sean grandes. Cualquier residente de verano se enojará si no se obtiene tal resultado.
¿Cómo cultivar ajos tan grandes que tengan el tamaño de un puño?
Basta tener en cuenta los cinco matices que se enumeran a continuación, y la cosecha de la verdura picante te deleitará con su alta calidad.
Es poco probable que el rendimiento de ajo sea alto si el residente de verano comete un error al elegir un lugar para plantar el cultivo.
Primero, debes recordar la rotación de cultivos. No se puede plantar ajo donde ya se cultivó esta planta la temporada pasada. El suelo volverá a ser apto para plantar este cultivo sólo después de 4 años.
En segundo lugar, debes asegurarte de que el suelo no sea ácido. El pH del suelo debe ser cercano al neutro.
El material de siembra debe colocarse de manera que no quede demasiado profundo.
El indicador de profundidad no debe exceder los cuatro centímetros.
Es malo que en el ajo aparezcan las llamadas “flechas”, es decir, brotes en flor.
Deberían ser eliminados. De lo contrario, esta parte de la cosecha del jardín "quitará" los nutrientes de los dientes de ajo.
Por supuesto, no debemos olvidarnos de la reposición oportuna de la deficiencia de componentes importantes para la planta.
En primer lugar, el ajo necesita nitrógeno. Por tanto, es imposible prescindir de la aplicación de fertilizantes nitrogenados.
El suelo en el que crece el ajo necesita un cultivo periódico.
Por lo tanto, es necesario aflojar la cubierta del suelo. Y al mismo tiempo eliminar las malas hierbas manualmente.
Entonces, el cultivo del jardín contará con todas las condiciones para su pleno crecimiento y desarrollo.