Por la apariencia de los calabacines, puedes determinar el momento en que necesitan la ayuda de un jardinero.
Ningún residente de verano querría perder su futura cosecha de calabacines en primavera. Pero tal resultado es bastante posible debido a una atención inadecuada.
Es por eso que las plantas jóvenes deben inspeccionarse periódicamente para corregir la situación a tiempo.
Si, durante la próxima inspección, los veraneantes notan que las hojas del calabacín se han vuelto amarillas y rizadas, toman medidas urgentes. El hecho es que esta es una señal muy alarmante.
En este caso estamos hablando de necrosis marginal. La mayoría de las veces ocurre debido a una deficiencia de elementos que retienen agua. En la mayoría de los casos, la planta carece de potasio.
Se trata la necrosis marginal. La planta se puede salvar si no lo duda y utiliza monofosfato de potasio. Los calabacines se alimentan con este producto.
El potasio se encuentra en muchos fertilizantes. Cuanto mayor sea su proporción en la droga, mejor.