Al mejorar los métodos habituales de plantación de cebollas, los agricultores han desarrollado un método fácil y sencillo que los residentes de verano apreciarán.
Esta es una tarea tediosa y agotadora, especialmente si te duele la espalda. Con este método, ya no tendrás que inclinarte ante cada bombilla y podrás ahorrar un par de horas de tiempo.
Antiguamente, en las granjas colectivas se plantaban cebollas mediante sembradoras, lo que recuerda algo al método que se describe a continuación.
Todo es extremadamente simple. Cogemos una azada y con ella hacemos surcos longitudinales en el parterre del jardín.
Luego cogemos una regadera y regamos todo con agua adecuadamente.
A continuación, tomamos una bolsa de cebollas y, moviéndonos a lo largo del lecho y paralelos a los surcos, arrojamos los bulbos en los surcos respetando el intervalo requerido.
El método no es muy diferente de plantar patatas bajo un arado o un motocultor.
Después de sembrar, tome una azada y llene con cuidado las plántulas con la tierra resultante.
La tierra se puede presionar ligeramente para que las semillas se compacten en la tierra húmeda.
Importante. Para que las cebollas crezcan y se desarrollen normalmente, deje al menos 10 cm de espacio libre entre plantaciones.