Los jardineros novatos primero deben comprender las complejidades de la rotación de cultivos. De este matiz depende no solo la cantidad de plántulas, sino también la calidad de la cosecha.
Cualquier residente de verano cultiva patatas en su parcela. Hablemos de lo que no debes plantar ni sembrar en este lugar en la nueva temporada.
Los jardineros experimentados no recomiendan descuidar las reglas de rotación de cultivos.
En primer lugar, cabe señalar que el lugar para plantar las patatas se cambia cada dos años. De lo contrario, no se puede evitar el agotamiento de la capa de suelo fértil, el desarrollo de enfermedades y la propagación de plagas.
En primer lugar, si se plantaron patatas en este lugar durante dos años seguidos, en el tercer año es mejor no hacerlo.
En segundo lugar, no conviene plantar fresas después de las patatas. Tienen una plaga común: el nematodo. Como resultado, de la cosecha de bayas solo quedarán recuerdos.
En tercer lugar, plantar repollo no es una opción. Aquí también la raíz del problema son las plagas: gusanos de alambre, grillos topo y el suelo después de las patatas no es tan fértil para cosechas abundantes de estos cultivos.
Para evitar que el espacio quede vacío, puedes añadir aquí legumbres. Los frijoles y los guisantes no solo darán una buena cosecha, sino que también ayudarán a restaurar el suelo.
Las remolachas, los rábanos, los nabos, los calabacines y las calabazas también producirán buenas cosechas.