Si está decidido a cosechar una cosecha de repollo blanco que hará que sus vecinos jadeen de envidia, debe actuar de acuerdo con ciertas reglas al plantar semillas.
Antes de comenzar el trabajo de siembra, desinfecte los granos en una solución débil de permanganato de potasio y caliéntelos en agua caliente a una temperatura de 45 a 50 grados.
Debes agregar jugo de aloe o miel al agua; no necesitas mucho, una cuchara es suficiente.
Estos componentes son estimulantes naturales del crecimiento. Después de tal tratamiento, la semilla debe secarse.
En un recipiente lleno de tierra, las semillas deben enterrarse a 0,7 cm, en hileras a una distancia de 3-4 cm.
Para crear condiciones de invernadero para las plántulas, cubra la caja con film transparente e intente mantener una temperatura de 18 a 20 grados con un signo más.
Con este enfoque, los primeros brotes aparecen después de 4-5 días; ahora el recipiente con las plántulas debe llevarse al lugar más luminoso, eliminando la película.
Dado que las plántulas necesitan entre 14 y 16 horas de luz diurna, vale la pena utilizar iluminación adicional por las noches.