Cultivar ajos grandes y sanos no debe considerarse un desafío; incluso si tienes poca experiencia en el cultivo de ajos, podrás afrontar esta tarea fácilmente.
Los siguientes consejos le ayudarán a cultivar cabezas de ajo grandes.
Tan pronto como note que han aparecido las primeras hojas del suelo, vale la pena aplicar fertilizante que contenga nitrógeno.
Muy a menudo, los residentes de verano usan urea disolviendo una cucharada del medicamento en 10 litros de agua.
Esta cantidad de solución es suficiente para un área cuyas dimensiones sean de 1 metro cuadrado.
Después de que las hojas de ajo alcancen una altura de 10 a 15 cm, retire con cuidado la tierra alrededor del bulbo y espolvoréela con ceniza, luego cúbrala nuevamente con tierra.
Se debe repetir la operación cuando aparezcan las flechas.
Al quitar los tallos de ajo, no se apresure a deshacerse de ellos todos; guarde algunos para usarlos como señal de que es hora de cosechar.
Tan pronto como note que la envoltura de las cabezas comienza a partirse y los bulbos aparecen hacia afuera, podrá comenzar a cosechar con seguridad.