Un trabajo preparatorio adecuado es la clave para obtener con éxito una rica cosecha de patatas.
No pierda el tiempo y germine los tubérculos de papa con anticipación, varios meses antes de plantarlos en campo abierto.
Si comienza a germinar semillas de manera oportuna, puede resolver varios problemas a la vez:
Las patatas se pueden plantar sin germinar, pero en este caso los tubérculos tardarán mucho más en germinar y las plántulas resultarán hostiles.
Habrá mayores posibilidades de que las plantas enfermen, ya que las enfermedades aparecen durante el periodo de germinación.
Los tubérculos de semilla de papa se colocan en cajas sobre aserrín húmedo, turba y humus y se mantienen en la oscuridad a una temperatura de 12 a 15 grados.
Será posible mantener el sustrato húmedo si lo mudas periódicamente.
Vierte una capa de aserrín húmedo, coloca encima las patatas y cúbrelas nuevamente con aserrín. Cubrir con cualquier material para evitar que se sequen.
Después de 3 días, las patatas pueden germinar.