Cultivar cebollas es una tarea sencilla.
La cultura no tiene pretensiones y requiere un cuidado mínimo.
Pero sucede que la planta entra en la flecha. Como resultado, si no se toman medidas a tiempo, el tamaño de la fruta sólo decepcionará.
Si desea obtener bulbos grandes y jugosos, debe tomar una serie de medidas simples.
Como señalan los jardineros experimentados, incluso antes de plantar, es aconsejable secar las cebollas durante una semana a una temperatura de 25 grados centígrados. Luego remojar en agua salada durante 3 horas. Para la solución es necesario tomar sólo una cucharada de sal por litro de agua limpia.
Después de eso, la semilla debe lavarse y luego remojarse nuevamente, pero en este caso en una solución de permanganato de potasio. Después de 2 horas, las cebollas deben lavarse y secarse nuevamente.
Es recomendable plantar el cultivo en aquellos lechos que hayan sido previamente humedecidos.
A continuación, solo es necesario seguir las técnicas agrotécnicas clásicas.