El geranio es popular porque es una planta sin pretensiones que florece profusamente con un cuidado mínimo.
Para que el geranio se deleite con flores exuberantes, es necesario alimentar periódicamente a la planta.
1. El desarrollo se ralentiza, las hojas se vuelven amarillas, se marchitan y se caen. Si los geranios no tienen suficiente nitrógeno, la planta dejará de florecer.
2. La deficiencia de potasio se manifiesta de diferentes maneras. Las hojas de geranio están moteadas, las venas se vuelven amarillas y el follaje inferior se cae.
3. Las hojas descoloridas indican que la planta necesita hierro.
4. La deficiencia de magnesio se indica por áreas amarillas entre las venas y brotes jóvenes podridos.
5. La falta de molibdeno inhibe la formación y el desarrollo de las hojas jóvenes, provocando que se pongan amarillentas y se marchiten.
1. Existen fertilizantes líquidos especiales, en gránulos o en forma de concentrado cristalino. Normalmente 1 gramo es suficiente. fertilizantes por 1 litro de agua.
2. Otra opción es la levadura y el azúcar. Revuelva 1 gramo en 1 litro de agua tibia. levadura y 30 gr. Sáhara. La solución se deja durante 1 hora y luego se vierten 5 litros de agua. La fertilización se aplica 2 veces en primavera.
3. Añade 1 gota de yodo a 1 litro de agua. La fertilización se utiliza una vez cada 20 días.
4. Por 1 litro de agua utilice 25 ml de peróxido de hidrógeno. La solución completa se puede utilizar a intervalos de 2 semanas.
5. De junio a septiembre, el geranio se puede alimentar con vitamina B. Tomar 1 ml de la sustancia por 2 litros de agua. Aplicar la solución cada 2 semanas.