Los jardineros experimentados saben que gracias a la poda de primavera se puede obtener un arbusto fuerte y ligero, lo que significa una cosecha abundante.
Anastasia Kovrizhnykh, experta de la publicación online Belnovosti, agrónoma y paisajista, explicó cómo realizar correctamente este procedimiento.
Para empezar, conviene empezar a eliminar las ramas enfermas, secas, débiles, congeladas y acamadas.
Una vez finalizada la poda sanitaria, se puede proceder a la de modelado.
Para hacer esto, deberá recortar los brotes, dejando de 4 a 5 cogollos por grosella espinosa joven.
Si la planta tiene 2-3 años, basta con dejar 3-5 brotes bien desarrollados.
Los arbustos maduros deberán eliminar las ramas que hayan superado la marca de los 5 años. En este caso, vale la pena dejar en el arbusto de 10 a 12 brotes de diferentes edades. En arbustos viejos esta cifra puede llegar a 20.
No lo olvide: dentro de un mes después del procedimiento, debe alimentar la planta y, si hubo poca nieve y el suelo estaba demasiado seco, regar los arbustos. Al mismo tiempo, es necesario tratar las grosellas contra enfermedades y plagas.