El calabacín es un cultivo sin pretensiones que produce una rica cosecha cada año.
Sin embargo, todavía surgen algunas dificultades a la hora de cultivar plantas, y una de ellas es el retraso en la aparición de las plántulas.
Las semillas de calabacín suelen germinar rápidamente, pero la velocidad de germinación se ve afectada por la temperatura ambiente.
Si es estable durante el día y no baja de 12 a 15 grados por la noche, entonces no hay necesidad de preocuparse: el calabacín germinará bien.
Si utilizas el procedimiento de remojo de brotes, no tendrás que esperar mucho. En el caso de sembrar semillas secas, el momento de aparición de los primeros brotes se desplaza a 5-10 días. Si no aparecen plántulas durante este tiempo, tendrás que replantar.
Utilice mantillo con recortes de césped o paja.
Las semillas se pueden plantar en una pila de abono y no tener miedo de que el calabacín resulte incómodo. Te deleitarán con la cosecha más rica posible.