Con la llegada del buen tiempo, poco a poco van apareciendo los primeros parterres en el jardín, marcando el inicio de una nueva temporada.
El perejil, considerado un cultivo sin pretensiones, es uno de los primeros que se siembra en campo abierto.
Sin embargo, romper una simple regla puede arruinar la cosecha. El perejil no te agradará con sus brotes.
No hay necesidad de apresurarse a plantar esta vegetación. El perejil necesita tierra cálida. Las semillas de la planta contienen aceites esenciales, por lo que el desarrollo no comenzará si el suelo está frío.
Por tanto, el perejil se siembra a finales de abril. Las verduras pueden soportar temperaturas de hasta +3 °C. La planta se desarrolla bien a +18 ... +20 °C.
Al sembrar perejil, no hagas agujeros demasiado profundos. En este caso, todo depende de la densidad del suelo. Por ejemplo, si lo rocías con tierra ligera de turba, puedes plantar a más de 1 cm de profundidad.
Existe una profundidad de siembra universal para el perejil, que equivale a tres tamaños de semillas.