La mayor posibilidad de destruir un cactus ocurre en otoño e invierno, cuando los jardineros aficionados intentan hacer la vida más fácil a las plantas en el alféizar de la ventana.
Durante este período, existe una alta probabilidad de cometer un error fatal, por lo que tendrás que despedirte de la "mascota verde".
En otoño e invierno, los cactus entran en un período de inactividad. Durante este período de tiempo no se replantan, no se alimentan y se riegan con menos frecuencia que nunca.
En proporción a la cantidad de luz solar que disminuye, es necesario reducir la cantidad de riego y la temperatura del aire.
Muchos jardineros no saben que los cactus se sienten bien a -2 ... -3 °C. Algunas especies viven y prosperan a -12 ... -15 °C.
El indicador óptimo para los cactus en otoño e invierno es de +5 ... +15 °C. El riego se reduce a un verdadero desierto, pero siempre que la habitación esté fresca.
En cuanto a la luz, no se puede mantener el cactus a la sombra. Debe colocar la planta en una ventana orientada al sur, proporcionando tanta luz como el clima pueda proporcionar.
Así, el frescor, los riegos poco frecuentes, la buena iluminación y el descanso completo permitirán que el cactus espere hasta la primavera sin problemas.