Nada estropea más la impresión de una cosecha que los frutos amargos.
Los tejidos de los pepinos producen una sustancia especial que les da amargor y hace que todas las partes de la planta sean insípidas.
Incluso los pepinos más bellos y fragantes no tendrán valor si son amargos.
Hay varias razones, que incluyen:
Para que los pepinos crezcan dulces, sabrosos y sin amargor, es necesario fertilizarlos con ceniza de madera e infusiones de hierbas. A los novatos les encantará rociar con ácido bórico.
Los fertilizantes aptos para la fertilización deben aplicarse de forma continua, siguiendo las instrucciones.
A los pepinos les encanta regar abundantemente, pero la humedad estancada puede ser desastrosa.
Durante la floración, los pepinos se riegan una vez cada 3 días durante el período de fructificación, en climas cálidos, las camas se pueden regar cada dos días, se riegan y se rocían;
La temperatura en el invernadero es de gran importancia para el sabor de los pepinos. Durante el día debe ser de al menos 20 grados, durante la fructificación puede llegar a 28.
Para preparar fertilizantes son adecuados el ácido bórico y el amoníaco.
Debe tomar 2 g de ácido bórico y disolverlo en una pequeña cantidad de agua tibia, ya que no se disolverá en agua fría. Luego, introduzca 10 litros de agua en el pulverizador y agregue una solución de ácido bórico.
Ahora necesitas tomar dos cucharadas de diez por ciento de amoníaco, combinar todo y revolver.
La solución de trabajo se rocía sobre la hoja. Es mejor realizar el procesamiento en un día nublado o por la noche.