Los áster florecerán mucho antes si realizas manipulaciones simples con las plántulas en la primavera.
Los jardineros experimentados siguen estos sencillos pasos año tras año para asegurarse de que sus plántulas crezcan fuertes y saludables.
Estas plántulas se convertirán en flores poderosas que decorarán el jardín hasta las heladas.
Para las semillas, se prepara tierra, que consiste en tierra común, arena y humus (proporciones iguales). Además, a la mezcla se le añaden perlita y ceniza (200 g por cubo de tierra).
El material de siembra debe tratarse con un fungicida. Protegerá las plántulas de enfermedades fúngicas. Los ásteres se siembran en suelo húmedo, pero es importante no exagerar con el riego.
Las plántulas necesitan un lugar bien iluminado, pero debe estar fresco, a no más de +15 °C. Si no se cumplen estas condiciones, las plántulas se estirarán.
Aster responde bien a los fertilizantes. A la planta le encanta fertilizar, por lo que se puede aplicar dentro de los 10 días posteriores a la siembra en campo abierto. Por 1 metro cuadrado. m añadir 50 g de sulfato de potasio, nitrato y superfosfato.