Los jardineros pasan por alto varios matices importantes, por lo que no logran obtener una cosecha decente de berenjenas.
Para que las cestas estén llenas de "pequeños azules" en verano, es necesario tener en cuenta varias reglas de cultivo.
Las heladas son perjudiciales para las berenjenas. La temperatura crítica es de +5 °C. A tasas más bajas, la planta morirá.
La verdura teme a las heladas, pero una siembra tardía puede provocar que los frutos no tengan tiempo de madurar. Puedes cultivar berenjenas sin invernadero, pero cuando hace frío, es necesario mantener refugios para plantar. Por ejemplo, botellas de cinco litros.
Para que las berenjenas maduren antes del otoño, es necesario confiar en variedades de maduración ultra temprana o temprana. Las plántulas se siembran a finales de febrero y hasta mediados de marzo. Todo depende de la temporada de crecimiento.
Como opción, el híbrido Ultra Early F1. El peso del fruto alcanza los 200-300 g. Se puede cultivar tanto en invernadero como en campo abierto. Sin embargo, en el primer caso, los frutos madurarán más rápido. En esto se pueden comparar con los tomates de maduración temprana.