Plantar zanahorias parece muy sencillo para muchos veraneantes. Sin embargo, las semillas tardan mucho en germinar y el resultado final es que hay demasiadas zanahorias en algunos lugares y vacías en otros.
Por eso, vale la pena considerar 7 formas de plantar zanahorias, que te permitirán evitar raleos en el futuro.
Este es uno de los métodos más populares que los jardineros utilizan con valentía. Las semillas deben tomarse en caso de apuro y sumergirse en el agujero. La distancia entre los agujeros debe ser de unos 10 centímetros. Gracias a este método de plantación, es posible conseguir que los cultivos aparezcan en racimos.
Tiene sentido utilizar un método similar si el área de plantación es grande. Las semillas se mezclan con arena seca. Puede recordar un ejemplo simple: llene un balde con arena hasta un cuarto de su capacidad, agregue 1 cucharada de semillas y mezcle. A continuación hay que sembrar zanahorias en los surcos.
Condición importante: la mezcla debe mezclarse bien. Si la arena está mojada, es poco probable que la mezcla se mezcle correctamente. Se debe prestar especial atención a la calidad de las semillas; el hecho es que la tasa de germinación con este método de siembra es baja.
Este método plantea muchas preguntas, pero también puede utilizarse para lograr buenos resultados. Por ejemplo, puedes mezclar semillas de zanahoria o lechuga agregándolas a un recipiente con arena. La esencia del método: los rábanos aparecerán antes y las zanahorias comenzarán a crecer en los huecos que quedan después de la siembra.
Algunos veraneantes combinan cebollas con zanahorias; esta combinación proporciona protección contra plagas y pequeños insectos. Y cuando se retiren las cebollas, las zanahorias recibirán la cantidad de espacio necesaria para una maduración completa.
Este es un método que requiere mucha mano de obra y que dará buenos resultados. El aterrizaje se realiza de la siguiente manera.
Gracias a este método se puede conseguir el intervalo ideal entre plantaciones.
Este método de siembra debe tomarse con responsabilidad, ya que es importante seguir estrictamente la tecnología. Debes tomar un calcetín viejo, colocar allí las semillas y enterrarlo durante unas dos semanas. A continuación, debe desenterrar el calcetín; en él se hincharán las semillas, lo que será más fácil de plantar, observando el intervalo correcto.
Debe quitar el émbolo de la jeringa, verter las semillas y agitar suavemente en el surco. Para utilizar este método de siembra se requiere habilidad, pero no debería haber ningún problema especial.
En tiendas especializadas puedes adquirir semillas en gránulos. Por supuesto, su costo siempre es mayor, pero cada residente de verano debe evaluar claramente su conveniencia. Las semillas grandes siempre son más fáciles de sembrar. Una de las desventajas es que algunas de las semillas simplemente no brotarán, por lo que quedarán espacios vacíos en el lecho del jardín.