Los residentes de verano practican una forma no estándar de plantar pepinos: en agua hirviendo. El método se considera bastante efectivo, ya que le permite obtener plántulas el segundo día.
También cabe destacar que la técnica es adecuada para sembrar semillas para plántulas e incluso en campo abierto. Veamos cada opción por separado.
1. En este caso, es mejor colocar las semillas en recipientes separados.
2. Los recipientes se llenan con tierra preparada y se riegan con agua hirviendo.
3. A continuación, las semillas se colocan en la superficie del suelo, se presionan fácilmente en el suelo, se excavan con cuidado, después de lo cual se cubre el recipiente con una película y se guarda en un lugar cálido.
A más tardar, los brotes aparecerán al cuarto día, tras lo cual se podrá retirar la película y proporcionar a las plántulas los cuidados habituales.
1. Hacer un surco de hasta 5 cm de profundidad en el lecho preparado y regarlo con agua hirviendo a razón de 5 litros por 1 metro cuadrado.
2. Luego las semillas se colocan en el suelo, se rocían con tierra, se compactan ligeramente y se cubren con una película.
3. Tan pronto como aparecen los brotes, se retira la película.
Se cree que de esta manera es posible plantar no solo pepinos, sino también todos los cultivos amantes del calor, incluidos los tomates, así como cultivos ornamentales.