Una de las condiciones obligatorias antes de sembrar semillas para plántulas es la desinfección de los contenedores de siembra y del suelo mismo.
El suelo no es lo último que determina la salud y el desarrollo de futuras plántulas. Muchos jardineros prefieren preparar la tierra ellos mismos. Te contamos cómo tramitarla.
Hoy en día puedes encontrar muchas recetas para preparar mezclas de tierra para cada cultivo de hortalizas. Entonces, lo más importante es desinfectar dicha composición para eliminar plagas y ambientes patógenos.
Una buena opción si el invierno es helado. Luego bastará con poner la bolsa de tierra en el balcón y listo. Luego, la tierra vuelve a calentarse durante 7 a 10 días y luego se expone nuevamente a heladas de 20 grados. El procedimiento se realiza 2-3 veces. Si el termómetro apenas baja a -5 por la noche, entonces tendrás que utilizar el congelador.
En este caso, el suelo se calienta. Hay 2 opciones: en el horno y al baño maría. Ambos funcionan igual de bien para deshacerse de enfermedades y plagas. En el primer caso, se vierte agua hirviendo sobre el suelo y luego se coloca en un horno precalentado a 90 grados durante 30 minutos.
Puedes utilizar el microondas, pero luego tendrás que envasar la tierra en bolsas de hasta 1 litro o en tarros de cristal.
Es más difícil procesar la tierra en un baño de agua: necesitará una bolsa de tela, un colador y una cacerola del tamaño adecuado. Coloque una bolsa de tierra en un colador y manténgala sobre agua hirviendo durante 30 a 40 minutos. Es importante observar el régimen de temperatura. Si supera el umbral de 100 grados, puede esterilizar completamente el suelo.
La mejor opción es el permanganato de potasio. La forma más sencilla: preparar una solución rosa en agua tibia, verterla generosamente sobre la tierra y, al cabo de unos minutos, regar con agua limpia. Pero en este caso, los microorganismos beneficiosos también corren el riesgo de morir. Para revitalizar el medio ambiente, deberá agregar bioaditivos: "Baikal M", "Shine", fosfobacterina, azotobacterina o sus análogos.
Esta es la opción más democrática, cuando se desinfecta el suelo y los patógenos mueren. Las mejores drogas son la tricodermina y la fitosporina. También se pueden agregar al suelo después de cualquiera de los métodos de desinfección anteriores.
¡Y lo último! Lo más importante es no olvidarse de tratar el recipiente, especialmente el que se utilizó para la siembra la temporada pasada.